Somos un grupo de escritores de novela negra. A través de este manifiesto, queremos manifestar nuestra perplejidad y nuestra más absoluta repulsa ante la decisión de encarcelar al vicepresidente del gobierno de la Generalitat de Cataluña, a siete de sus consellers y a los presidentes de Òmnium Cultural y de la Assemblea Nacional Catalana, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart.

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Por nuestra profesión, estamos acostumbrados a idear tramas enrevesadas con las que, además de entretener a los lectores, intentamos aportar a la literatura la mirada crítica sobre nuestra sociedad que proporciona el género negro. A través de las historias que inventamos, a menudo denunciamos los abusos de poder, la violencia como recurso para resolver los conflictos, las redes de corrupción, la explotación de los débiles, las arbitrariedades, las injusticias... Es por ello que queremos denunciar también la gravísima situación de represión que se está viviendo en Cataluña y las arbitrariedades cometidas por el poder judicial y el gobierno español.

 

La respuesta del gobierno español al conflicto político que se vive en Cataluña ha consistido en aplicar una política de represión propia de una dictadura y no de un estado democrático. Creemos que la confrontación política debe resolverse a través del debate de las ideas y de las urnas, y que las actuaciones represivas que está llevando a cabo España para combatir el movimiento independentista —en forma de guerra sucia, de violencia policial contra la población, de suspensión del autogobierno y de encarcelamiento de líderes y dirigentes políticos— son inadmisibles e impropias de un país democrático.

 

Quienes firmamos este manifiesto tenemos ideologías y sensibilidades políticas diferentes, pero compartimos la defensa de los valores democráticos. Consideramos que la violación de las libertades y de los derechos humanos que se está produciendo en Cataluña no puede justificarse apelando a ninguna constitución ni a ninguna ley, y que no puede considerarse un mero asunto interno del Estado español en el marco de la Unión Europea, a la que, como ciudadanos europeos, hemos cedido una parte de nuestra soberanía. Queremos denunciar que, en estos momentos, la democracia está seriamente amenazada en España por un gobierno y unos jueces que utilizan las leyes de manera arbitraria y perversa, a fin de proporcionar una apariencia de legalidad a actuaciones policiales y judiciales propias de un estado totalitario.

 

Ante esa grave situación de indefensión, apelamos a la solidaridad internacional y exigimos la inmediata intervención de las instituciones europeas para restituir la libertad de los políticos encarcelados y para condenar y detener la política de represión iniciada por el gobierno de España contra Cataluña.

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